Vitaminas B

Autores:

Marcel Hrubša

Hallazgos:

Esta revisión resume el conocimiento actual sobre las vitaminas esenciales B1, B2, B3 y B5. Estas vitaminas generalmente se obtienen de la dieta (B3 también a través del triptófano), son solubles en agua (lo que afecta la pérdida en el procesamiento de alimentos, la absorción celular y la seguridad a través de la eliminación renal), y su uso terapéutico es principalmente para hipovitaminosis, aunque su seguridad permite otras investigaciones. El ácido nicotínico (B3) se destaca como un agente hipolipemiante en dosis en gramos. El artículo también detalla los métodos de detección, las fuentes alimenticias, los efectos del procesamiento/almacenamiento y las funciones fisiológicas de estas vitaminas.

Dosis:

La revisión detalla varias dosis: CDR de tiamina (B1) (por ejemplo, 1,1 mg/día para mujeres, 1,2 mg/día para hombres), dosis terapéuticas para la deficiencia (por ejemplo, 50–100 mg IV al día para adultos con beriberi, luego 10 mg/día IM, seguido de 3–5 mg orales al día; 25–30 mg IV dosis inicial para beriberi infantil; 50–100 mg SC/IV dos veces al día para el síndrome de Wernicke-Korsakoff), y 100–300 mg IV al día para pacientes en estado crítico. Ácido nicotínico (B3) en dosis en gramos (por ejemplo, 1000–6000 mg/día) para la dislipidemia, y 10–300 mg/día (hasta 1000 mg/día) para la pelagra. Pantetina (derivado de B5) a 600–900 mg/día para la dislipidemia (por ejemplo, 300 mg tres veces al día); ácido pantoténico a 2,2 g/día para el acné. Dexpantenol (B5) tópicamente al 2–5%.

Evaluación de la Calidad del Estudio:

El texto identifica el documento como un artículo de revisión: "Esta revisión resume el conocimiento actual sobre las vitaminas esenciales B1, B2, B3 y B5". Se publica en "Nutrients . 2022 Jan 22;14(3):484", una revista de acceso abierto, bajo una licencia Creative Commons Attribution (CC BY) (https://creativecommons.org/licenses/by/4.0/). El artículo incluye un DOI (10.3390/nu14030484), PMCID (PMC8839250) y PMID (35276844). Menciona a un editor ("Editor: Ebba Nexø"), fuentes de financiación ("Programa Erasmus+ de la Unión Europea, Acción clave 2: Asociaciones estratégicas, Proyecto nº 2020-1-CZ01-KA203-078218. MH agradece a la Universidad Carolina (SVV 260 549). LKK y LJ agradecen a MH-CZ-DRO (UHHK, 00179906)") y una declaración de ausencia de conflicto de intereses por parte de los autores. La revisión cubre los métodos para la detección de vitaminas, las fuentes alimenticias, los efectos del procesamiento y las funciones fisiológicas.

Todos los Efectos:

Autores:

KRISTJANA DHULI, ZAKIRA NAUREEN

Hallazgos:

Esta revisión destaca que la calidad de la dieta, particularmente la dieta mediterránea, está fuertemente asociada con la salud cerebral y puede influir en las enfermedades neurológicas y la salud mental. La adopción de una dieta saludable rica en compuestos bioactivos con actividades antioxidantes, antiinflamatorias, neuroprotectoras y otras actividades beneficiosas puede ayudar en la prevención y el manejo de las enfermedades neurológicas (como el Alzheimer, el Parkinson, el Huntington, la EM, la ELA) y el envejecimiento cerebral. La revisión analiza varios componentes dietéticos, compuestos naturales (por ejemplo, polifenoles, ácidos grasos omega-3, vitaminas B, N-acetilcisteína, fosfolípidos, GABA, melatonina, S-adenosil metionina, triptófano, magnesio) y plantas medicinales (por ejemplo, Bacopa monnieri, Withania somnifera) que han demostrado ser prometedores en la mitigación de la neurodegeneración, aunque sus efectos a menudo dependen de la dosis y requieren ensayos clínicos a gran escala adicionales.

Participantes:

Este artículo de revisión analiza numerosos estudios que involucran diversos participantes humanos y modelos animales. Los participantes humanos incluyen: individuos con función cognitiva normal (por ejemplo, N=70, edad 30-60 años; N=52; N=44 voluntarios sanos; N=8 voluntarios estresados; N=260 sujetos sanos de 60-94 años), individuos con deterioro cognitivo leve (N=482, edad 76,7-77,5 años), pacientes con demencia (N=1865, edad media 73 años), participantes con riesgo de enfermedad de Alzheimer (EA) (N=38), pacientes con EA (N=25), personas mayores con memoria deteriorada o deterioro cognitivo (N=130; N=494; N=101 pacientes geriátricos), pacientes con enfermedad de Parkinson (EP) (N=1731 individuos sin EP de 65+ años; N=13 pacientes con EP con depresión; N=249 pacientes con EP), pacientes con enfermedad de Huntington (N=211), pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) (N=302; N=31 esporádicos), pacientes con esclerosis múltiple (EM) (N=396), pacientes con trastorno bipolar (N=30; 23 mujeres), niños con TDAH, mujeres con SPM (N=40, edad 18-45 años), pacientes menopáusicas (N=20), jóvenes adultos presos (N=231), pacientes con TAE (N=11), pacientes con función intelectual deteriorada (N=16), estudiantes de medicina (N=68), pacientes sin demencia (N=5386; N=1081 japoneses), pacientes con accidente cerebrovascular (N=2589) y fumadores adultos (N=120). Los modelos animales mencionados incluyen: ratas Wistar macho, ratones TgCRND8 (modelo de EA), ratones SOD1 (G93A) (modelo de ELA), células microgliales murinas BV-2, modelo animal de depresión, ratones ICR y un modelo de ratón inducido por estrés.

Dosis:

Como revisión, el texto cita varias dosis de diferentes estudios para numerosos suplementos. Los ejemplos incluyen: Melatonina (0,25-1,25 mg/kg i.v.; 3 mg/día para la migraña; 50-300 mg/día oral para la EM; 60 mg/día oral o 300 mg/día rectal para la ELA), Fosfatidilserina (PS) (100 mg/día PS-DHA; 300 mg/día PS derivado de la soja; 400 mg PS + 400 mg PA por día para el SPM), Ácidos grasos omega-3 (por ejemplo, 2,5 g/día n-3, que contienen 2085 mg de EPA y 348 mg de DHA para la ansiedad en estudiantes), S-adenosil metionina (SAMe) (800 o 1600 mg/día para la abstinencia de fumar; 800-3600 mg/día para la depresión en la EP; 800 mg/día para la depresión), Magnesio (una dosis en bolo de 16 mmol de MgSO4 infundida durante 15 min, luego 65 mmol de MgSO4 durante 24 h para la isquemia cerebral). El texto señala que los efectos dependen de la dosis.

Evaluación de la Calidad del Estudio:

Esta es un artículo de revisión titulado 'Suplementos dietéticos en enfermedades neurológicas y envejecimiento cerebral' publicado en 'J Prev Med Hyg . 2022 Oct 17;63(2 Suppl 3):E174–E188.' (PMCID: PMC9710403, PMID: 36479494). La revisión cita una amplia gama de tipos de estudio, que incluyen: estudios clínicos, estudios de seguimiento, estudios de cohortes (incluidos los basados en la población), estudios longitudinales, estudios transversales (incluido el análisis basal), estudios prospectivos, encuestas, estudios in vitro, estudios en animales, ensayos controlados aleatorios (algunos especificados como doble ciego, controlados con placebo, cruzados equilibrados), ensayos clínicos abiertos, ensayos clínicos piloto, estudios de cohortes epidemiológicos, evaluaciones geriátricas integrales y estudios de casos y controles (por ejemplo, ensayo IMAGES). La investigación fue financiada por 'la Provincia Autonoma di Bolzano en el marco de LP 15/2020 (dgp 3174/2021)'. Los autores 'declaran no tener conflicto de intereses'.

Todos los Efectos:

Hallazgos:

El metaanálisis encontró un beneficio significativo de las fórmulas multinutrientes que contienen tanto PUFA n-3 como vitaminas B (a menudo junto con otros nutrientes) frente al placebo en la cognición global evaluada mediante puntuaciones compuestas de una batería de pruebas neuropsicológicas (G = 0,23, P = 0,002), la cognición global utilizando medidas únicas de cognición (G = 0,28, P = 0,004) y la memoria episódica (G = 0,32, P = 0,001) en adultos mayores. No se encontró ningún efecto significativo para la función ejecutiva en el metaanálisis primario. Los análisis de subgrupos sugirieron beneficios para la memoria episódica y la función ejecutiva en adultos mayores sanos, y para la cognición global y la memoria episódica en aquellos con DCL.

Participantes:

Revisión sistemática y metaanálisis de 14 artículos (N total = 4913 participantes). Los participantes eran adultos mayores (edad media típicamente de 60 a 70 años, con un estudio de edad media de 87 años; duración del seguimiento de 24 semanas a 4 años). El estado de salud de los participantes al inicio varió entre los estudios: cognitivamente sanos, quejas subjetivas de memoria, deterioro cognitivo leve (DCL), enfermedad de Alzheimer prodrómica, enfermedad de Alzheimer diagnosticada o cognitivamente sanos con un evento cardiovascular previo.

Dosis:

Las dosis variaron entre los 14 estudios incluidos, que proporcionaron combinaciones de PUFA n-3 y vitaminas B, a menudo como parte de fórmulas multinutrientes con ingredientes adicionales. Ejemplos de dosis diarias de ensayos específicos incluyen: mezcla Fortasyn Connect (por ejemplo, 300 mg de EPA, 1200 mg de DHA, 400 μg de ácido fólico, 3 μg de vitamina B12, 1 mg de vitamina B6); otra fórmula (por ejemplo, 1 g de DHA, 160 mg de EPA, 1 mg de ácido fólico, 20 μg de vitamina B12); una combinación de 800 μg de ácido fólico y 800 mg de DHA. La revisión señaló que todas las fórmulas de nutrientes incluidas en los metaanálisis tenían una dosis de DHA superior a 580 mg por día.

Evaluación de la Calidad del Estudio:

Revisión sistemática y metaanálisis de ensayos controlados aleatorios (ECA). Los ensayos incluidos fueron controlados con placebo. Bases de datos buscadas: The Cochrane Library, EMBASE, CINAHL, Scopus, MEDLINE. Se incluyeron un total de 14 artículos (n = 4913 participantes; seguimiento de 24 semanas a 4 años). El riesgo de sesgo en los estudios individuales se evaluó utilizando la herramienta revisada de Cochrane para evaluar el riesgo de sesgo en ensayos aleatorios (RoB 2). El metaanálisis utilizó modelos de efectos aleatorios y la estadística Hedges G. Se evaluó la heterogeneidad estadística (prueba χ2 y estadística I2). Se realizaron análisis de subgrupos basados en el estado de salud cognitiva inicial. Limitaciones mencionadas: heterogeneidad en los métodos y dominios de las pruebas cognitivas; algunos estudios incluidos tenían preocupaciones de sesgo (por ejemplo, cálculo de puntuación poco claro, datos faltantes); diez de los estudios incluidos recibieron financiación o apoyo de fabricantes de suplementos; los procesos de selección y extracción de datos no fueron totalmente independientes y por duplicado.

Todos los Efectos:

Autores:

Anne-Laure Tardy, Etienne Pouteau

Hallazgos:

Esta revisión narrativa concluye que existe una sólida justificación biológica y fisiológica para la participación de vitaminas seleccionadas (vitaminas B, C) y minerales (hierro, magnesio, zinc) en la producción de energía celular, lo que se traduce en efectos sobre la fatiga física y mental, y las funciones cognitivas y psicológicas. Las deficiencias subclínicas o marginales pueden afectar negativamente estas áreas, y la suplementación es probablemente beneficiosa, aunque se necesita precaución con respecto a la dosis. Una ingesta adecuada contribuye a la función cognitiva normal, un mayor bienestar, una menor fatiga y un estado de ánimo positivo.

Participantes:

La revisión se centra en datos humanos, principalmente de poblaciones adultas y adolescentes, incluidos individuos sanos y aquellos con ingesta o estado nutricional inadecuados. También se incluyen datos seleccionados de poblaciones más jóvenes y mayores cuando es relevante.

Dosis:

La revisión cita varias dosis de numerosos estudios para las vitaminas B, la vitamina C, el hierro, el magnesio y el zinc. Los ejemplos incluyen: Tiamina (B1) 50-300 mg/día; Riboflavina (B2) 2-100 mg; Ácido fólico (B9) 400µg-1 mg/día (un estudio citó 15 g/día durante 60 días); Vitamina C 500 mg-6 g/día (un estudio 10 g IV); Hierro 42-80 mg/día o infusión de 1 g; Magnesio 250-800 mg/día u 8-10 mg/kg/día; Zinc 15-30 mg/día. La revisión enfatiza la precaución contra la sobredosis y sugiere mantenerse dentro de las magnitudes de la RDA por seguridad.

Evaluación de la Calidad del Estudio:

Revisión narrativa. Se reconoce la financiación de Sanofi, y varios autores son empleados de Sanofi, lo que indica un posible sesgo de la fuente de financiación. La revisión afirma que se da prioridad a los datos humanos y tiene como objetivo examinar la evidencia científica, al tiempo que señala que parte de la justificación de las afirmaciones se basa en fundamentos bioquímicos o deficiencias manifiestas en lugar de datos fisiológicos empíricos sólidos para estados subclínicos.

Todos los Efectos:

Hallazgos:

Esta revisión sistemática y metaanálisis de 17 estudios estimó que la prevalencia global de los síntomas de ansiedad entre los adultos mayores es del 28% (IC del 95%: 21%–35%). Los análisis de subgrupos indicaron que el continente de residencia y las herramientas de evaluación (Inventario de ansiedad geriátrica - GAI, o Escala de ansiedad geriátrica - GAS) afectan significativamente la prevalencia general. Los factores asociados más informados para la ansiedad abarcaron dominios sociodemográficos (por ejemplo, sexo femenino), relacionados con la salud (por ejemplo, comorbilidades físicas) y psicosociales (por ejemplo, bajo apoyo social, aislamiento social).

Participantes:

Adultos mayores. La revisión se centró en los adultos mayores según lo definido por los estudios incluidos. Los ejemplos de poblaciones de participantes de los 17 estudios revisados (tamaños de muestra que oscilan entre 58 y 897) incluyen pacientes de departamentos de psiquiatría geriátrica, centenarios, adultos mayores que viven en la comunidad, pacientes de atención primaria y residentes de residencias de ancianos.

Evaluación de la Calidad del Estudio:

Revisión sistemática y metaanálisis de 17 estudios epidemiológicos o transversales. Se adhirió a las pautas PRISMA; protocolo registrado en PROSPERO (CRD42023425147). Búsqueda exhaustiva de las bases de datos Medline (a través de PubMed), Embase, Web of Science y Scopus realizada hasta el 27 de febrero de 2023. La calidad de los estudios incluidos se evaluó utilizando la herramienta de evaluación crítica del Instituto Joanna Briggs (JBI) para estudios de prevalencia. La síntesis de datos utilizó un modelo de efectos aleatorios para el metaanálisis. Se observó una heterogeneidad significativa (I2 = 96%). El sesgo de publicación se evaluó utilizando la visualización del gráfico de embudo y la prueba de Egger (p = 0,19, sin indicación de sesgo de publicación). Las limitaciones reconocidas incluyen: los estudios incluidos fueron principalmente transversales, potencial de sesgo de publicación y restricciones de idioma, representatividad de la muestra (muchos participantes de centros de atención para adultos mayores o pacientes hospitalizados) y el tamaño total de la muestra de aproximadamente 4200 de 17 estudios se consideró insuficiente para la población mundial de adultos mayores.

Todos los Efectos: